Trinitat Gilabert | ARA
Esther Vivas, activista alimentaria, acaba de publicar el libro El negocio de la comida. ¿Quién controla Nuestra alimentación?, de Icaria editorial, que a mediados de noviembre estará disponible en las librerías.
¿Quién controla nuestra alimentación?
Un puñado de empresas, que son las que monopolizan todos los tramos de la cadena agroalimentaria y que anteponen sus intereses particulares, hacer dinero, a nuestras necesidades alimentarias.
En el libro, mencionas nombres concretos de las empresas que lo hacen. ¿Cuáles son?
Sí, son desde grandes multinacionales que controlan las semillas, como Monsanto -la número uno en semillas transgénicas- y Syngenta, y también monopolizan la comercialización de agrotóxicos, hasta otras empresas como Nestlé y Danone, y grandes cadenas de supermercados, que determinan también qué consumimos, como Carrefour y Mercadona.
¿Qué soluciones propones?
Ante un modelo de agricultura y alimentación secuestradas, lo que considero fundamental es poner en el centro los derechos del campesinado, el respeto al medio ambiente y las necesidades de los consumidores, y esto significa, en la práctica, apostar por la soberanía alimentaria.
Y la soberanía alimentaria, ¿qué es exactamente?
Consiste en reapropiarnos de todos los pasos de la cadena alimentaria, apostando por semillas tradicionales, por una agricultura local, de proximidad, ecológica, libre de pesticidas y transgénicos. Es la agricultura que recupera y cultiva variedades antiguas y que pone en el centro a la tierra y a las personas. Se trata de saber qué se cultiva y qué comemos.
Además, ¿el sabor de los alimentos es mejor?
Volvemos a descubrir el sabor de la comida… comiendo, aunque parezca una obviedad, comida de verdad.