Una reseña del libro ‘Mamá desobediente’
“Mamá desobediente. Una mirada feminista a la maternidad” es el último libro de la periodista y escritora catalana Esther Vivas que acaba de salir publicado en Chile con Editorial Catalonia. Se trata de una obra necesaria que invita a reflexionar sobre la maternidad en sentido emancipador y feminista, y que saca del armario temas invisibles, como la maternidad real, la violencia obstétrica en la atención al parto o las dificultades para llevar a cabo una lactancia materna satisfactoria.
Ser madre no es una tarea fácil. Y ahora que la maternidad ya no es un deber, ha llegado la hora en que las mujeres decidan cómo quieren vivir esta experiencia. Hasta el momento, el ideal materno se ha movido a caballo entre la madre sacrificada, al servicio de la familia, y la superwoman, esa madre que llega a todo, siempre disponible para el mercado de trabajo. Ante estos ideales inasumibles de maternidad, útiles al sistema, y generadores de culpa y malestar, Esther Vivas nos invita a rebelarnos. Un libro que apuesta por colocar las necesidades de la mujer y de la criatura en el centro la experiencia materna. Dicho en otras palabras, el reto es que la sociedad se adapte a la maternidad y no al revés, como sucede.
Ni el posparto es fácil ni amamantar a una criatura más allá de los primeros meses de vida debería significar un problema. Sin embargo estas son dificultades con las que se encuentran muchas mujeres, en un sistema que da la espalda a la experiencia materna, la crianza y el cuidado. Una vez Esther Vivas se convierte en madre, se da cuenta de que hay temas como gestar, parir o amamantar que están silenciados, aunque son prácticas esenciales para la reproducción humana. Por ello, siguiendo la tesis de que lo personal es político, más allá de escribir un ensayo exhaustivo sobre la maternidad, Esther Vivas narra en primera persona su vivencia personal a través de este libro, con la voluntad de romper mitos y silencios y hacer visible temas que no lo son, como la infertilidad, el embarazo, la pérdida gestacional, el parto, el puerperio o la lactancia materna.
Con una mirada firme y argumentada, pero sobre todo feminista y rebelde, “Mamá desobediente” invita a destapar las contradicciones y ambivalencias de la maternidad, señalando, al contrario de lo que nos han dicho, que no es una tarea fácil. El libro se divide en tres grandes bloques, el primero consiste en una mirada abierta a la maternidad, a las dificultades que enfrentamos las mujeres para ser madres, las relaciones complejas entre feminismos y maternidades, la imposible conciliación; el segundo capítulo analiza el derecho de las mujeres a un parto respetado, seguro y libre de violencia; y el tercer capítulo aborda las virtudes de la lactancia materna y los intereses económicos tras la lactancia artificial, en lo que podríamos llamar el negocio de la mamadera.
En definitiva, “Mamá desobediente” es una lectura necesaria para vivir la maternidad en libertad, sin imposiciones y al margen de prejuicios. Es también un llamamiento para que la experiencia materna, y todo lo que la rodea, deje de pertenecer al ámbito privado y pase a considerarse una cuestión pública, colectiva y política.